Arte que estimula,

acompaña y transforma

¡Te damos la bienvenida a miniArtists!

Es un programa de estimulación temprana artística que combina Música, Artes plásticas y Movimiento para acompañar el desarrollo integral de niños y niñas de 0 a 6 años. Cada sesión está diseñada para fortalecer el vínculo afectivo en familia, creando experiencias lúdicas, sensoriales y educativas.

Nos inspira la convicción de que el arte es un lenguaje universal que despierta emociones, construye identidad y potencia el desarrollo cognitivo, emocional y social desde los primeros años de vida. Por eso, en miniArtists trabajamos desde tres valores fundamentales:

Lo que nos distingue

Respeto

Valoramos la dignidad y autenticidad de cada niño (a) y su familia, respetando sus ritmos y formas de expresión.

Equidad

Creemos que el arte y el crecimiento integral son un derecho de todos los niños y niñas.

Creatividad

Fomentamos la expresión libre y la imaginación como motores del aprendizaje.

Vínculo afectivo

Promovemos experiencias artísticas que fortalecen la conexión emocional y estimulan el desarrollo integral.

Lo que hace especial a miniArtists es el corazón detrás de cada encuentro: una mezcla de arte, pedagogía y sensibilidad que transforma cada taller en una experiencia significativa y memorable para toda la familia.

Descubrí los beneficios de experimentar el arte en familia

Cantar, escuchar y crear música en familia fortalece el vínculo afectivo, estimula el lenguaje y genera memorias emocionales duraderas.

El ritmo compartido sincroniza corazones, y las melodías se convierten en abrazos sonoros que acompañan el desarrollo.

Moverse juntos es una forma poderosa de comunicación no verbal.

La expresión corporal en familia promueve la conexión emocional, mejora la coordinación, regula la energía y permite reconocer y liberar emociones en un ambiente seguro y divertido.

Crear con las manos, explorar texturas y colores en compañía nutre la creatividad y refuerza la confianza.

Experimentar las artes plásticas en familia permite compartir miradas, respetar los procesos y celebrar juntos los logros, dejando recuerdos tangibles de los momentos vividos.

El contacto con el arte en los primeros años de vida no solo estimula la creatividad y la sensibilidad, sino que favorece la plasticidad cerebral, potenciando la creación de nuevas conexiones neuronales.